«El jardín de vidrio» de Tatiana Tîbuleac

El amor, el amor. Todos gimen, discuten, gastan dinero. Un asesino, eso es el amor. Porque aquel que no ama, ¿qué hace? Vive, trabaja, es persona... una persona que no ama. Busca el sosiego en otras cosas, disfruta, por ejemplo, con la lluvia. Y aquel que ama - esa persona -, ¿cómo es? Una nopersona, eso es lo que es. Ni duerme, ni está satisfecho ni tiene luz en la mirada. Piensas que no sé lo que estoy diciendo, ¿eso piensas? También Zahar Antonovich fue joven en otro tiempo. Con manos y con pies, con dientes. No era guapo, pero tampoco santo, tenía de todo. Un asesino - como ya he dicho, el amor -, y vosotros lo cantáis como idiotas.

El jardín de vidrio, Tatiana Tîbuleac (pág. 291)


Sinopsis

Una novela iniciática sobre el trauma y la búsqueda de la identidad. Una lectura contundente, hechizante, cruel e inquietante que cuestiona la maternidad, el amor y los vínculos que nos unen con nuestro pasado.

Moldavia en los años más grises del comunismo. La anciana Tamara Pavlovna rescata a la pequeña Lastotchka de un orfanato. Lo que en principio puede parecer un acto de piedad esconde una realidad terrorífica. Lastotchka ha sido comprada como esclava, para ser explotada durante casi una década recolectando botellas por la calle. Aprender. a sobrevivir robando y mendigando, rechazando las solicitudes de hombres demasiado insistentes, en un ambiente de violencia y miseria. Basada en la propia historia familiar de la autora, El jardín de vidrio es, ante todo, un ejercicio de exorcismo doméstico, una carta imaginada por una ni.a hacia sus padres desconocidos donde el dolor a causa de su abandono, el desamor y la ausencia de ternura y emoción se muestran como heridas que quiz. nunca lleguen a cicatrizar del todo. La falta de piedad del mejor Dickens y la escritura caleidoscópica de Agota Kristoff hacen de esta segunda novela de Tatiana Tîbuleac una tragedia tan cruel y compasiva como reveladora de aquello que nos depara el destino y su belleza.

Valoración personal

Nota

10 (Excelente)

* Puntuación de 0 a 10

Opinión personal

Narrada en primera persona, nos cuenta los primeros años de la vida terriblemente dura de una joven que sufre todo tipo de desgracias en el barrio de Chisináu, capital de Moldavia cuando todavía formaba parte de la URSS. Una historia extremadamente dolorosa pero sin sentimentalismos forzados, donde la protagonista buscará su propia identidad mientras se enfrenta a un mundo en pleno proceso de cambios.

La novela consta de capítulos cortos de entre 1 y 2 páginas en los que nos va contando a modo de caleidoscopio, o como un pase de diapositivas, los avatares de la vida de la protagonista. Una vida repleta de dificultades que te desgarran el corazón; y todo ello contado de una forma dura sin llegar a recurrir a lloriqueos y sentimentalismos facilones. Aunque su estructura me pareció al principio extraña y muy experimental, conforme pasa el tiempo te acostumbras y acabó por gustarme más y más; llegó a convencerme tanto su narrativa que no consigo imaginarme la historia contada de una forma más convencional sin caer en sensiblerías y ñoñerías. 

Ésta ha sido mi primera novela de Tatiana Tîbuleac, y me ha encantado. Según comentan otros lectores su primera novela «El verano en que mi madre tuvo los ojos verdes» todavía es mejor, así que no tardaré mucho en leerla. Y por supuesto, estaré atento para seguir la carrera de Tatiana Tîbuleac que pasa automáticamente a ser una de mis autoras de cabecera.

Datos técnicos

Título: El jardín de vidrio
Autora: Tatiana Tîbuleac
Traductora: Marian Ochoa de Eribe
Editorial: Impedimenta
Encuadernación: Rústica con sobrecubierta
ISBN: 978-84-17553-92-0
Idioma Original: Rumano
Idioma: Español
Año edición: 2021
Año primera edición: 2019
Páginas: 355

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